Última tirada larga

El tiempo se echa encima. Ya sólo faltan 3 semanas para el primer gran objetivo: el Maratón de Valencia del próximo 18 de noviembre. Si la semana pasada tocó acudir hasta la ciudad del Turia para participar en su medio maratón y evaluar un poco el estado de forma, ayer cayó la última tirada larga de este periódo de preparación. Fueron 2 horas de rodaje que sirven, no sólo para acumular esos kilómetros tan necesarios para el cuerpo, sino también para entrenar el aspecto mental, algo tan importante cuando hablamos de carreras de larga distancia. La mañana era fría y desapacible, con 5ºC de temperatura media y con algo de lluvia fina, lo que le añadía un plus de dureza. 

Las sensaciones fueron buenas, aunque iba algo helada, pero me he encontrado bien durante todo el entrenamiento. Además, mi marido me ido acompañando durante toda la sesión con la bicicleta, así he podido tomar avituallamiento cada 5 kilómetros sin problemas y me he sentido bien acompañada, pues la famosa "soledad del corredor de fondo" suele aflorar en días como el de hoy. Cuando corres durante tantos kilómetros es muy habitual tener momentos más o menos difíciles, durante los cuales te pasan muchas cosas por la cabeza, pero teniéndolo a él ahí, cada zancada, cada parcial, se hacía más llevadero. A partir de ahora tocará bajar el volumen para que el cuerpo asimile todo el trabajo e ir afinando un poquito y poder llenar el zurrón de energía, de fuerza, de capacidad y de ánimos para afrontar otro duro desafío. 

El circuito en que entrené es prácticamente llano. Va desde Soria hasta Garray, junto al Río Duero, acabando en el paraje Junta de los Ríos. En total han sido 28 kilómetros. 

Durante el rodaje he tomado los geles Energy Boost, de Victory Endurance, que tienen una combinación ideal de hidratos de carbono complejos y simples, aminoácidos, electrolitos y vitaminas par proporcionar energía durante todo el entrenamiento. Además, reduce los calambres gracias a la reposición inmediata de los electrolitos. Me han ido muy bien, no he sentido nada de malestar gástrico y son bastante fáciles de digerir. Por ello quisiera reiterar algo en lo que insisten las marcas y prensa especializada, que no se deben hacer pruebas el día del maratón, sino que es recomendable probarlas previamente en entrenamientos para comprobar cómo los asimila nuestro organismo. Como bebida isotónica llevé Iso Energy, también de Victory Endurance. Me va genial y su sabor es bastante agradable. Está especialmente diseñada para rehidratarse y optimizar y aumentar la resistencia durante el entrenamiento. 

Tras el entreno y un buen almuerzo, una fantástica y reparadora siesta, hay que hacer honor a un bien nacional tan preciado.