Corriendo por el patio de mi casa.

El pasado domingo disputé una nueva carrera. En esta ocasión fue en los 10,7K de Pamplona. Era una prueba que llevaba semanas pensando en correr. Se trata de una carrera popular que se organiza dentro del marco de la prueba reina de allí, la Media Maratón.

Decidí correrla porque me venía bien para mi planificación de cara a una realizar una media maratón a finales de este mes, o bien de cara a ir adquiriendo la forma gracias a las competiciones, un buen complemento a los duros entrenamientos diarios. Además, la organiza uno de los clubes por los que he pasado cuando era más joven, el Beste Iruña, del que guardo grandes recuerdos y amigos. Ellos quisieron recordar en esta edición de la carrera popular a una de sus atletas y organizadoras de esta carrera, que nos dejó en Octubre por un accidente en la montaña.

Correr en casa siempre me hace sentir bien, el esfuerzo parece hasta que se hace menos pesado, conozco las calles, la gente, las cuestecillas… así todo se lleva mucho mejor.

Ha sido un gran fin de semana en el que he disfrutado como una niña, dando una charla-coloquio el sábado por la tarde en el Baluarte de Pamplona dentro de las actividades programadas en la Feria del corredor. El domingo gocé compitiendo en la carrera popular donde, además de tener  buenas sensaciones, hice  primera en la clasificación femenina, por lo que me voy muy contenta y satisfecha de este fin de semana en la capital Navarra.

Toca seguir entrenando y mentalizándome para la media maratón, una distancia que hace mucho tiempo que no disputo. Espero llegar con todas las ganas del mundo. 

Diario de Navarra

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